os iconos pueden renacer, como demostró el Tambour en 2023, con motivo de su 21.º aniversario. También pueden adoptar nuevos aspectos de diseño y concepto, explorando diferentes facetas de la identidad. El Tambour Convergence de Louis Vuitton es un homenaje a los montres à guichet de una época pasada, reinterpretados con la elegancia contemporánea que distingue a cada creación de Tambour.

El Tambour Convergence reproduce los lados delicadamente curvados del Tambour que se estrechan hacia un punto de inflexión, lo que permite que el reloj se ajuste cómodamente a la muñeca y cree una apariencia de delgadez que contradice la robustez del movimiento automático que lleva dentro.

Las asas rediseñadas distinguen al Tambour Convergence de la colección Tambour actual, marcando el comienzo de una nueva era de diversificación estética dentro de la línea Tambour y atrayendo la atención con su perfil armonioso y geométrico. Sus superficies superiores están pulidas a mano, mientras que las superficies exteriores laterales están ahuecadas y microarenadas, lo que agrega sofisticación visual a través del juego de acabados contrastantes.

Los laterales de la caja con acabado satinado hacen que el Tambour Convergence parezca aún más delgado que su grosor de 8 mm, y el diámetro de la caja de 37 mm es versátil y discreto en una variedad de tamaños de muñeca. La corona pulida refleja la forma de la caja y está sutilmente estriada para facilitar la cuerda y la configuración, y un fondo de caja transparente exhibe el nuevo calibre automático de manufactura LFT MA01.01.

Las horas y los minutos se muestran a través de dos guichets esculpidos en la preciosa platina, cuyas formas curvas recuerdan los detalles interiores de la casa familiar de Louis Vuitton en Asnières. Las horas giran en el sentido de las agujas del reloj a través del guichet arqueado superior, y los minutos ocupan el arco inferior, con un rombo de oro o platino colocado entre los dos para una lectura intuitiva de la hora. Una gran cantidad de detalles ocultos se combinan para hacer que la visualización de las horas y los minutos sea lo más legible posible, desde los bordes metalizados de los cristales de zafiro sobre los guichets, hasta la forma de los propios cristales de zafiro, curvados lo suficiente para satisfacer la necesidad de resistencia estructural, pero no lo suficiente como para deformar los números debajo.

Incluso el estilo de los números de las horas y los minutos refleja la atención al detalle en el Tambour Convergence. Los números Arábigos son elegantes con un toque de estilo caligráfico, un homenaje contemporáneo a los relojes clásicos de principios de siglo. Por encima de todo, el Louis Vuitton Tambour Convergence es un vehículo de autoexpresión. Es el lienzo del esteta, la página en blanco del narrador, el diario de viaje del viajero.

Los dos nuevos modelos Tambour Convergence de Louis Vuitton, uno en oro rosa y el otro en platino, poseen cada uno su propia estética distintiva. El modelo de platino presenta discos de horas y minutos con un acabado plateado cepillado y números azules transferidos. La placa preciosa, que forma el foco decorativo del reloj y enmarca la indicación de la hora, está engastada con 795 diamantes mediante una técnica conocida como engaste en nieve, en la que las piedras de diferentes tamaños se fijan en su lugar tan cerca y minuciosamente que no se puede discernir su engaste. El engaste en nieve debe realizarse a mano, por un engastador con mucha experiencia que sea capaz de combinar piedras de varios tamaños de tal manera que el efecto final sea el de una superficie brillante sin fisuras. El Tambour Convergence en platino utiliza piedras en una gama de siete tamaños y requiere 32 horas de trabajo meticuloso para completarlo.

Las creaciones de alta relojería de Louis Vuitton se combinan a menudo con los métiers d’art tradicionales, y los artesanos de la Maison crean esferas y cajas tan exquisitas como técnicos son los movimientos que las albergan. La superficie de la preciosa placa permite imaginar diversas interpretaciones futuras.

Con el paso de los años, el Tambour Convergence de oro pulido adquirirá una pátina otorgada por el uso diario, un palimpsesto de marcas sutiles que refleja la historia de su portador. Es un verdadero artefacto relojero, que indica el tiempo a través de su mecanismo interior y, al mismo tiempo, registra el paso del tiempo en su superficie exterior. El modelo de oro pulido es el que más atraerá a quienes creen en tener una relación con sus relojes. Es un reloj con un potencial singular de singularidad, una singularidad que proviene de la persona que elige usarlo.

La caja del Tambour Convergence se produce íntegramente en los talleres de La Fabrique des Boîtiers, las nuevas instalaciones de fabricación de cajas de Louis Vuitton en Ginebra. En su interior de 37 mm late el nuevo movimiento automático de fabricación propia, el Calibre LFT MA01.01 con 45 horas de reserva de marcha. La creación de este movimiento marca un hito en la fabricación de relojes para La Fabrique du Temps Louis Vuitton y pone de manifiesto la solidez de la producción y la experiencia en ingeniería en el segmento de la relojería de la Maison.

Este calibre compacto es un movimiento que solo mide la hora y cuya robustez se demuestra por su frecuencia de volante de 4 Hz (28.800 alternancias por hora), que es el estándar de la industria. Su rotor de oro rosa de 18 quilates de alta inercia da cuerda de manera eficiente al barrilete del movimiento, lo que proporciona al mecanismo niveles óptimos de energía adecuados para un reloj de uso diario. Este compromiso con los estándares modernos de calidad y confiabilidad cronométrica se demuestra aún más con características como el volante de oscilación libre con bloques de inercia de alta precisión (masselots). Para aquellos que aprecian los toques de la relojería tradicional, detalles como el clic del barrilete elegantemente arqueado realzan el refinamiento visual del Calibre LFT MA01.01.

Los acabados excepcionales caracterizan al Calibre LFT MA01.01, desde los puentes pulidos con chorro de arena con bordes pulidos con chorro de arena hasta la periferia pulida y con muescas en V del rotor de oro rosa. Cada superficie y cada acabado ha sido cuidadosamente seleccionado para crear una apariencia general de riqueza de texturas y armonía sensorial, en línea con la estética contemporánea de la colección Tambour Convergence y el lenguaje de diseño de Tambour.

El sutil juego de texturas se complementa con los zafiros transparentes del movimiento, un cambio con respecto a los rubíes sintéticos fucsias convencionales y una firma de la alta relojería contemporánea en La Fabrique du Temps.

Con el debut de este nuevo movimiento en el Tambour Convergence, Louis Vuitton celebra su herencia relojera y proyecta la promesa de su futuro relojero. Oculta por el volante, visible solo para los ojos más agudos, se encuentra la marca del fabricante que representa esta promesa: el poinçon LFT de La Fabrique du Temps Louis Vuitton.