En el caso de que otro testimonio de las habilidades de Vacheron Constantin en la orquestación de la artesanía artística de la relojería fuera necesaria, el nuevo modelo de joyería en la colección Patrimony es el obvio candidato. Su diámetro de 35 mm pone en escena un espectáculo extraordinario de la luz. Unos deslumbrantes 16.2 quilates de un conjunto de diamantes baguette engastados en forma de garra hacen que el tiempo se pare para siempre. Este modelo también viene en una esfera de 40mm.
Caja, esfera y cierre: ni una mota de oro blanco queda libre de diamantes. Las piedras de talla redonda irradian desde el centro de la cara aumentando los círculos para cubrir toda su superficie. El efecto es verdaderamente fascinante.
El relojero responde al reto del engastador. El calibre 1400, de renombre probado, se aloja en este palacio resplandeciente. El movimiento mecánico de cuerda manual es visible a través del cristal de zafiro del fondo de caja. El acabado de este movimiento se hace totalmente a mano siguiendo una tradición que ha pasado de generación en generación desde 1755 y de acuerdo con las más exigentes reglas del arte de la relojería. Las superficies planas están adornados con Côtes de Genève y los bordes afilados están biselados y pulidos, incluso en las cabezas y las ranuras de los tornillos.
No puede haber una más verdadera expresión del arte de la relojería. No debe haber excepciones para este tipo de reloj excepcional. El Patrimony Traditionnelle High Jewellery puede así presumir del prestigioso Sello de Ginebra. Institucionalizada por el Parlamento de la República y Cantón de Ginebra en 1886, el Sello es una garantía de protección de la procedencia, la mano de obra, la durabilidad y destreza. Siempre independiente, esta etiqueta sin precedentes de calidad fue revisada a fondo en 2011. La certificación no se aplica sólo al movimiento, sino que ahora se extiende al reloj en su conjunto. Este es un hito importante para esta marca de autenticidad que siempre ha contado con el apoyo de Vacheron Constantin.
Fuente: Vacheron Constantin